A veces, de tan llenas que están nuestras mentes con preocupaciones,
no advertimos ni siquiera, lo que está nuestro alrededor.
A veces no nos damos cuenta ni de quien está a nuestro lado.
Y así me pasó, esta vez, a mí…
No había advertido que tenía vecinos nuevos…
Les había visto pasar, sí,
bulliciosos y a la carrera, más de una vez.
También en mi patio los sorprendí más de alguna tarde de fin de semana,
cuando el sol ya empezaba a caer,
o temprano en la mañana,
algún domingo (nunca nos levantamos tarde).
Por eso, fue una sorpresa darme cuenta,
un día que salí a ejercitar mi pierna lastimada,
que vivían a la vuelta de la esquina,
y que, además, tenían una crecida familia…
Me alegró la vida
el ver los ajetreos de esa madre,
por alimentar a sus hijos,
apreciar el ingenio del padre,
que tan bien solucionó la escasez de viviendas,
y los divertidos ejercicios de los hijos
practicando las enseñanzas de sus mayores…
Una sorpresa agradable, desde luego,
pues de este tipo de vecinos
tenemos muy pocos,
y quisiera tener muchos más…
no advertimos ni siquiera, lo que está nuestro alrededor.
A veces no nos damos cuenta ni de quien está a nuestro lado.
Y así me pasó, esta vez, a mí…
No había advertido que tenía vecinos nuevos…
Les había visto pasar, sí,
bulliciosos y a la carrera, más de una vez.
También en mi patio los sorprendí más de alguna tarde de fin de semana,
cuando el sol ya empezaba a caer,
o temprano en la mañana,
algún domingo (nunca nos levantamos tarde).
Por eso, fue una sorpresa darme cuenta,
un día que salí a ejercitar mi pierna lastimada,
que vivían a la vuelta de la esquina,
y que, además, tenían una crecida familia…
Me alegró la vida
el ver los ajetreos de esa madre,
por alimentar a sus hijos,
apreciar el ingenio del padre,
que tan bien solucionó la escasez de viviendas,
y los divertidos ejercicios de los hijos
practicando las enseñanzas de sus mayores…
Una sorpresa agradable, desde luego,
pues de este tipo de vecinos
tenemos muy pocos,
y quisiera tener muchos más…
El vecino...
La vecina, en la casa que construyó su marido sobre los alambres de la TV cable.
Los retoños, practicando sus primeras lecciones de vuelo...
¡¡Qué maravillosos vecinos tiene!!!
ResponderEliminary que trabajadores...
Me alegro que esa comunidad siga viento en popa!!! ajajjaaaa
Muchos saludos candorosos para usté y su familia!!!
Hay que tratarlos muy bien durante su estancia... ¡Esos vecinos son maravillosos!
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