17 noviembre 2011

Gracias a Dios que tengo esposa...


Ayer fui a hacerme una ecografía del hombro

Preparé todo lo que tenía que llevar, yo solito, que no soy de esos maridos que hay que hacerles las cosas, no.

Tengo compañeros de trabajo cuya mujer tiene que hacerles todo, incluyendo prepararles el equipaje cuando se van a trabajar, y que se indignan cuando se les olvida algo.

Cosa así como: ¡esta mujer, que no me puso la toalla, no podré bañarme!, o bien: ¡no puedo hacer nada, mi mujer no me echó las llaves!

Yo siempre les digo que no pueden ser tan inútiles, que no hay derecho a serlo, y que está bien que tu mujer se encargue del lavado y planchado, pero el equipaje tiene que hacerlo uno, que nadie debiera saber mejor que uno mismo lo que necesita, ni se puede depender de la mujer para que te ponga las llaves, el celular o la billetera dentro del bolsillo. O sea, somos grandecitos ya como para poder hacer las cosas solos, ¿no?

Pero como bien dice el refrán, "en boca cerrada no entran moscas". 
Y así fue que hoy pasó algo que me calló la boca.

Fui a lo de la eco, como decía, y llevé todo: documentos, la citación, la ecografía anterior (de mayo), en fin, lo que necesitaba. Y mi negrita, siempre fiel, fue conmigo. Ya en camino, me preguntó si llevaba todo. Y yo, por cierto, le respondí no sin cierta molestia: "claro que sí, todo, ¿que crees?" Ella se quedó callada, pero tenía esa cara de duda, como si no me creyera mucho.

Llegados a la clínica, me atendió una chica, le pasé la citación, me pidió mi identificación, hizo el ingreso, me pidió que pusiera el dedo índice en el lector, para generar el bono de consulta, y me dijo: 

- Son $ 2.700.

Y yo me quedé mirándola, sin comprender qué me quería decir. ¿Cómo? le dije.

- Que tiene que cancelar $ 2.700, descontado el seguro.

Y entonces me dí cuenta, me puse pálido, registré mentalmente mis bolsillos vacíos, y miré mi billetera, que tenía sobre el escritorio de la chica, y supe que no tenía dinero...
Había llevado todo lo que debía llevar, excepto ese pequeño detalle.

Me dí vuelta en el asiento y miré hacia atrás, supongo que con la vergüenza reflejada en la cara, y llamé a mi negrita. Cuando llegó junto a mí, le dije cuanto era, y si tenía dinero.

Abrió la cartera, me lo dió -con cara de Ay, Señor- y se fue a su asiento.

La recepcionista me miró - a su vez- con una cara de "todos-son-unos-inútiles", que me hizo decir: 
Gracias a Dios que tengo una esposa...

Y ella sonriendo, me dijo: Al menos usted lo reconoce, eso ya es algo...

Siempre -admití- ¿cómo podría negarlo? 




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9 comentarios:

  1. Esa cantidad ¿es mucho o poco?¿A cómo está el cambio?.
    Y eso, hoy por ti, mañana por mi.

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  2. Bueno, a todos se nos pasa algo alguna vez. Flipo con tus compañeros de trabajo, sus mujeres son unas santas.

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  3. Pseudo: Es poco. Son 4 Euros. O 5,5 dólares.

    Doctora: No son unas santas. Sólo son chilenas.
    Pero se les está quitando esa cualidad de aguantar tanto: la tasa de separaciones (con o sin divorcio) sube más cada día.

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  4. Pues sí.. menos mal que está tu negrita.. para eso y muchas cosas más.. te puedo asegurar que es un placer leerte cuando hablas de ella. o sea que ella también puede dar Gracias a Dios!!!

    Besos

    esta vez para los dos..

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  5. Esa radiografía es la tuya original??? Porque se ve como un un cráneo!!!

    La verdad que todos los hombres deberían ser así. Yo jamás le haría la maleta a mi pareja ni iría detrás de él recogiendo su mierda. Pero hay muchas mujeres que sí lo hacen -incluso de mi edad, que es lo más triste-. El ejemplo más cercano lo tengo en casa. A mi padre se lo hay que hacer todo (incluso la maleta cuando viajan). Yo he tenido mil discusiones con él por ello. Aunque voy entendiendo que ellos son un matrimonio y que sus reglas son ésas, que yo no puedo meterme (aunque de vez en cuando me hierve la sangre y me meto). Eso sí, decir que favor de mi padre que por otro lado es muuuuy trabajador con su huerta, con el mantenimiento de la casa, los coches, los perros, arregla todo lo que se fastidia... Solo que piensa que eso son cosas de hombre y las de la casa son de mujeres.

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  6. Gracias Lady Tea, la verdad es que no hablo más de ella porque prefiere el anonimato...

    Y, Cristina, lo que yo creo es que se puede hacer la maleta del otro, pero no que es una obligación el hacer la maleta del otro... (y no, no es mi ecografía... ¿es extraña, ¿no?)

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  7. maldito blogger que me fastidia los comentarios....

    En fin, como te iba dicieno.
    Como pseudo me había asustado esa cantidad que habías escrito, pensaba que era un dineral!
    Y sobre lo otro, pues los hombres no son inútiles, pero lo que pasa es que algunos se lo hacen (así sus vidas resultan mas fáciles) y a otros los hacemos tontos nosotras mismas tratándolos como si tuvieran cinco años y no fueran capaces de hacer nada solos.
    La sociedad en la que vivimos todavía es demasiado machista, porque no pasa nada por hacer algo así por tu pareja, pero lo malo es que creo que habrán muy pocas situaciones en las que esto suceda al contrario y el hombre le prepare la maleta a la mujer.

    Aún así... creo que las mujeres siempre suelen estar bastante mas centradas para algunas cosas, así que no está de mas reconocérselo :)

    Oye, qué te pasa en el hombro? yo también tengo alguna radiografía de hombros en casa, que a mi novio lo operaron hace un año

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  8. Eres Chileno? Por eso no manejas dinero! jijiji, Porque las Chilenas lo manejamos jijij
    Me ha gustado tu relato.
    Besitos de Arte.

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  9. ArtedeAmar: Ja ja ja, ese comentario deja claro que también eres chilena...

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Sólo dilo, no te cortes...