08 febrero 2012

Que_ te_ dijo


Pasamos un par de horas en el Terminal terrestre de Guayaquil. Muy lindo, por cierto, con patio de comida, tiendas y supermercado, en sus tres pisos. Para mi, provinciano como soy, una maravilla de terminal (En nuestra capital no hay algo así).

Mientras estuvimos allí me tocó escuchar una conversación que me divirtió mucho. No pude evitar reírme (para adentro, obvio). En cierto momento, estaba yo apoyado contra una columna, observando a la gente -actividad a la que dedico siempre algo de tiempo- en tanto mi negrita regresaba de aquel lugar donde las mujeres suelen demorar.

Pasos más allá, una pareja se acercaba caminando distraídamente, tal vez esperando la llegada de algún pasajero , pues no portaban equipaje alguno. De pronto, él tomó su celular y contestó una llamada. Se le vio nervioso y apresurado por colgar pronto.

Luego, siguieron caminando hacia donde yo estaba, conversando de algo que no podía oír, pero el tipo se veía a la defensiva.

Cuando llegaron a mi altura, pasaron por detrás de la columna, lo suficientemente cerca como para que yo pudiese escuchar la voz de ella, calmada, quizá si suave, formulando una -al parecer- inocente pregunta:

- Y, ¿qué te dijo?

Desde mi posición, no podía escuchar la respuesta de él, que me llegaba como un murmullo ininteligible. 

- mnhmnhmnh mhhnnmnmn

(Se detuvieron allí, a pasos de donde estaba)

- Sí, pero qué te dijo (la voz ahora era calmada, mas no suave).

- mhnmmhm mnhnmmnh (la voz del tipo parecía aún más venir de debajo de la tierra)

- Qué te dijo. (tono algo grave)

- mnhmnh mhhnnm (con un tono que parecía algo desesperado)

- Que - te - dijo. (voz fría, pero aún sin alzar el tono)

- (no se oyó ni siquiera un murmullo de respuesta, pero a juzgar por lo que sigue, al parecer intentó un cambio de estrategia. Uno errado.)

- No me toques!! (molesta)

- mnh mhhn

- Que - no - me - toques!! (palabras remarcadas y voz muy molesta)

- mhnmmhm mnhnmmnh

- Qué - te - dijo (Dicho en tono bajo, pero duro y medio arrastrado, diríase mordido por unos dientes apretados...)

En ese momento llegó mi negrita, y nos fuimos de ahí, pero ellos quedaron en el lugar.

- Qué te dijo (Fue lo último que escuchamos al alejarnos. Con la voz volviendo a ese muy peligroso tono suave que usan las mujeres)

-.-

Definitivamente, el tipo no conocía a las mujeres. Era un novato. De lo contrario, habría sabido que cuando no se da una respuesta clara y precisa -la primera vez- a esa pregunta, nada, absolutamente nada, podrá hacer que una mujer deje de desconfiar, y aunque luego le diga la pura verdad, y jure estarla diciendo, ella quedará siempre preguntándose si no le estará escondiendo algo más.

Esperar que se olvide de la respuesta no dicha es tan ilusorio como pretender que un pitbull suelte la presa, una vez la ha mordido...

Un novato.

.

4 comentarios:

  1. Pues sí, un novato. Lo peor es que al final se lo acabaría diciendo pero no se va a librar del cabreo de ella.

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  2. Ja, ja, ja...

    Bueno, Cristina, yo también hubiera querido ver el desenlace, pero mi negrita había regresado, y como yo no soy un novato, pues si me dicen vamos, voy...


    Dra., precisamente. Si no contestó a la primera, ya no tiene salvación. No le queda más que empezar a hacer méritos...

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  3. Pero ¿qué le diría?....ainsssssss.....odio quedarme con la duda.

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Sólo dilo, no te cortes...