23 enero 2012

Ella se rió de mí...

Conocí en Ecuador a una linda chica, a la que difícilmente voy a olvidar, pues se rió de mí.
Sí, por cierto, se rió, mucho y de buena gana.
Y fue así:

Caminábamos con mi negrita por el Malecón,  un lindo paseo a orillas del río Guayas, en Guayaquil, y hacía mucho calor, pese a que no hacía ni media hora que había dejado de llover.
Providencialmente, apareció ante nosotros un puesto de venta de helados.
Nos acercamos, y los helados para ambos costaban 3.60 dólares.
Ajá, pensé yo. Esta es la oportunidad de deshacerme de todas esas monedas que tengo en el bolsillo. Eran seis, de distintos valores, y sumaban exactamente los 60 centavos.
De modo que le pagué a la chica con un billete de 5 y las monedas en cuestión, diciéndole -muy ufano- que al fin iban a dejar de molestarme en el bolsillo.

Ella apretó botones en la caja registradora, se abrió la gaveta, miró adentro y sonriendo me dijo:

-Creo que no va a poder deshacerse de ellas...

- ¿Por qué no?, inquirí, sorprendido.

- Pues porque tengo que darle 2 dólares de vuelto, y no tengo sino monedas de 10 centavos, me dijo pícaramente, en tanto me pasaba no sólo mis seis monedas, sino que también otras catorce más !!!

Y tanto ella como mi cara mitad se rieron de mí...


Y siguió riéndose mientras servía los helados, y también cuando me los entregó.



(Le dije que para desquitarme iba a ponerla en mi blog. 
Y lo he cumplido. El que avisa no traiciona, dicen...)

.

4 comentarios:

  1. Estás de vuelta!! Pues sí, se rió bien de ti. Qué tal las vacaciones? Qué bonito debió de ser el viaje!

    ResponderEliminar
  2. Bueno Cristi, el viaje, como las vacaciones, ha tenido de un todo. Bueno y malo.
    Pero ya lo iré contando de a poco...
    :)

    ResponderEliminar
  3. Me alegro que lo hayas pasado bien. Me encanta tu nuevo fondo.. QUÉ BONITOOOOOOOO!!!!

    Besazo de bienvenida!!!

    ResponderEliminar
  4. Míralo desde el punto de vista positivo, si hubiera venido un huracán no se le habría llevado el aire XD.

    ResponderEliminar

Sólo dilo, no te cortes...