17 octubre 2011

Tour par la France

Yo poco veo -o leo- las noticias.
Si no son un cúmulo de desgracias, son los comentarios sobre el fútbol o el dime que te diré de los políticos.



De manera que sólo ayer me enteré que ciertos jóvenes chilenos -dirigentes universitarios- andan de gira por Europa. Y no pude evitar pensar que, siendo así, es muy comprensible que el paro estudiantil continúe en este país, a pesar de los esfuerzos del gobierno por llegar a un acuerdo.
¿Cómo no? Después de todo, un tour por Europa no es algo que te regalen así como así.

¿Qué importa la situación de los demás estudiantes? ¿Qué importan todos aquellos que quieren volver a clases, que quieren comenzar el semestre siguiente? ¿Qué importa lo que suceda con las universidades, si no se inicia el semestre? Sea como sea, las universidades requieren de dinero para funcionar, y para pagar a sus  funcionarios, mismos que se han quedado en una situación falsa: tienen trabajo, mas no sueldo.
Pero, ¿eso a quién le importa?
Obviamente, cuando se anda de paseo por el viejo mundo, no se piensa en toda esa gente que no recibe su sueldo desde hace 4 o 5 meses. No se piensa en que no tienen cómo pagar sus deudas, la renta o el dividendo, no se piensa en que no tienen con qué alimentar a sus familias. 
¿Qué importa que alguno de ésos con trabajo y sin sueldo tenga que repartir pizzas para ganar algo con que dar de comer a sus hijos, cuando se está en París o en camino a Ginebra, bajo el brillo de las luces y en el objetivo de las cámaras?

Nada, pues. Sigamos en paro, que eso lo soluciona todo.

Sobre todo, cuando quienes lo dirigen tuvieron la precaución de congelar sus carreras universitarias antes de convocar a paro, para asegurar sus estudios, en tanto dejan que quienes los siguieron hace meses atrás pierdan un año así, tan tranquilos.  Digo hace meses, porque hace mucho que ya no representan sino a un  sector intransigente, mientras la gran mayoría sólo quiere retomar sus clases. No podrán hacerlo -por cierto- hasta que ciertos jóvenes se cansen de pasear, de posar para los fotógrafos, de ser el centro de la atención de todos.

Y eso, es difícil que ocurra.

Pasé por un colegio secundario, hace unos días. Un colegio "tomado" por los estudiantes, dizque en apoyo de los universitarios, dizque para "mejorar la educación". La puerta estaba abierta y allí se veían 6 o 7 estudiantes. Sentados -mas bien acostados- sobre las escaleras, cada uno con una chica sentada encima, besándose y acariciándose. Alimentados por sus padres -que los apoyan, por cierto- ¿cómo no van a estar en paro? ¿Podrían acaso querer  volver a clases y terminar con el relajo? No creo, es evidente su preocupación por el estado de la educación en el país...

Años atrás (bastantes), cuando estudié en la universidad, no era gratuita, sino que la pagaban sólo quienes tenían dinero para hacerlo. El que más tenía, más pagaba. Quienes teníamos menos, pagábamos menos. Quienes no lo tenían, no lo hacían. ¿Cuál era el problema de eso? Que tenía compañeros de carrera que llevaban 3 años repitiendo el mismo curso. Compañeros que una carrera de 4 años no la habían terminado en 7, y seguían allí, gastando dinero que no era de ellos. Los que podían pagar, tenían que solventar los gastos de muchos que no tenían ningún interés en estudiar, sino en vivir una "vida de universitarios", a costa de los demás y de sus padres.

Me pregunto: ¿Cuesta tanto entender que no puede cambiarse todo un sistema educacional de un día para otro?. Es que cualquiera sabe que eso toma años. También, que si se quiere mejorar la educación hay que empezar desde abajo. Ni un paro, ni diez, pueden cambiar la educación así como quien se cambia de camisa.

Pero eso, ¿qué importa, cuando se está de tour por Francia?

.



2 comentarios:

  1. Ya ves, debe ser un mal endémico... los que están arriba representando a los débiles siempre se acaban olvidando de ellos y se convierten en corruptos.

    ResponderEliminar
  2. Es como dice el comentario anterior, lamentablemente muchas veces se hace bueno el refrán de que "ni pidas a quien pidió, ni sirvas a quien sirvió"

    Gracias por tu presencia en mi Cueva

    ResponderEliminar

Sólo dilo, no te cortes...